El tanque de mantenimiento, también conocido como depósito o caja de mantenimiento, es un componente de algunas impresoras de inyección de tinta que recoge el exceso de tinta generado durante los ciclos de limpieza del cabezal de impresión. Esta tinta residual se almacena en el tanque para evitar que se acumule dentro de la impresora, lo que podría dañar el sistema o afectar la calidad de impresión. Cuando el tanque se llena, la impresora suele advertir al usuario y, en algunos casos, puede bloquear la impresión hasta que se reemplace el depósito o se realice un mantenimiento adecuado. Además, muchos de estos tanques incorporan un chip que lleva un registro del uso y la cantidad de tinta almacenada.
Es común en impresoras de inyección de tinta, especialmente en modelos de alto volumen o uso intensivo (como algunas de Epson, Canon o HP).
Funciones del tanque de mantenimiento
Recolección de tinta residual: Al realizar limpiezas automáticas o al desatascar los cabezales, la impresora expulsa tinta sobrante que no se utiliza en la impresión. Este residuo se almacena en el tanque para evitar derrames.
Prevención de daños: Evita que la tinta residual contamine el interior de la impresora o dañe componentes electrónicos.
Mantenimiento programado: Cuando el tanque se llena, la impresora suele mostrar una alerta.
Características
-Ubicación: Varía según el modelo, pero suele estar accesible para facilitar su sustitución.
-Diseño: Puede ser un cartucho absorbente, un depósito plástico o una bolsa interna.
-Vida útil: Depende del uso y la frecuencia de limpiezas. En impresoras de gran volumen, puede requerir cambios periódicos.