Básicamente, un cartucho de tinta es un recipiente con un chip que contiene tinta líquida para plasmar en el papel el texto y/o las imágenes que le manda el ordenador a través de un chip y que se monta en impresoras de inyección de tinta. El trasvase del cartucho al papel se realiza mediante el cabezal de impresión.
Las impresoras de inyección de tinta (Inkjet) son las que utilizan cartuchos de tinta. Someramente, el funcionamiento de éstas es cargar la tinta en los cabezales de impresión, compartimentos con distintas boquillas o inyectores que son los que van soltando minúsculas gotas de tinta mientras el cabezal recorre la hoja de papel, y se adhieren a éste por impacto.
Hay cartuchos de tinta negra y cartuchos de tinta de color. Los colores se generan mediante la mezcla de los tres primarios: cian, magenta y amarillo, colores estos que pueden ir en cartuchos individuales para cada uno de ellos o los tres en un solo cartucho (tricolor). Ejemplo de los primeros son nuestros cartuchos alternativos Epson 603XL, cada color va en un cartucho independiente, siendo necesario sustituir sólo el que se agote. De los segundos, sirva de muestra nuestro cartucho HP 302XL. El de color incorpora en un solo cartucho los tres colores y el negro aparte. Puede ocurrir que si, por ejemplo, se ha hecho más uso del cian que de los otros dos y se agotase, el cartucho deje de imprimir y haya que sustituirlo aunque quede tinta de alguno de los colores.
Cartuchos y cabezales son elementos independientes que deben sustituirse cuando se agota la tinta, en el caso de los primeros, y cuando lo recomienda el fabricante (o dan síntomas de haber llegado a su fin) en el caso de los segundos. Por ejemplo, los cartuchos de Epson 603XL, 604XL, T2991/2/3/4, T1891/2/3/4, entre otros, sólo llevan tinta y se montan en los cabezales que están en la máquina.
Sin embargo, también existen cartuchos de tinta que llevan incorporado el cabezal, sustituyéndose éste cada vez que se cambia el cartucho; son más caros que los que son sólo depósito de tinta pero es cierto que ahorran el cambio periódico de cabezales de impresión de las máquinas. Muchos de los cartuchos de tinta HP como el HP 301, HP 62, HP 302, HP 304 o HP 305 son muestra de ello.
Las temperaturas extremas y la falta de uso de las impresoras de inyección puede ocasionar el secado de la tinta en los cabezales, obstruyendo estos e incluso deteriorándolos definitivamente. Es aconsejable utilizarla una vez cada 7 o 10 días.
¿Pueden mezclarse cartuchos de tinta originales y compatibles?
La respuesta es que no es recomendable, ya que se han registrado incidencias extrañas cuando se han mezclado cartuchos. Lo mejor es que los cartuchos sean todos originales o todos compatibles.
No obstante, en las impresoras que montan cartuchos de tinta sin cabezal, es posible que sí se puedan mezclar. Los cartuchos que incorporan el cabezal en ningún caso.
